Imaginad que en el zoo tenemos un recinto con leones cuya separación con el publico es un foso con agua, hasta aquí todo correcto, los leones permanecerán dentro del recinto sin problema. ¿Pero que pasa si el zoológico se encuentra en una zona donde los inviernos son muy duros por ejemplo Canadá, Noruega o Rusia? Probablemente el foso se congele ocasionando en el mejor de los casos que los leones no puedan salir al recinto exterior durante varias semanas o incluso meses. En el peor de los casos puede derivar en que un león campe a sus anchas por el zoológico ya que ha andado sobre el hielo y ha escapado. La posible congelación del agua puede ocasionar problemas como los que hemos dicho anteriormente pero hay una solución para evitar que el agua se congele. Para que el agua se congele primero debe haber una temperatura inferior a 0ºC y segundo el agua tiene que estar sin movimiento, es decir que no tenga corriente, la mayoría del agua de los fosos no tiene corriente. La solución es sencilla, si el agua se congela cuando no tiene movimiento pues vamos a darle movimiento, a lo largo del foso ponemos tubos con distintas salidas los cuales van echando aire, este aire ocasionara el agua se mueva continuamente evitando así la congelación del foso. La cantidad de aire que debe salir depende del tamaño del foso o la profundidad en la que pongamos la salida de aire, una vez se tenga instalado el sistema se deberá ir probando cual es la cantidad idónea de aire para ese recinto. 
No hay comentarios:
Publicar un comentario